Las compañías cautivas de seguros incrementaron un 53% en todo el mundo durante el año 2020, debido a una situación difícil del mercado asegurador que llevó a más empresas a equilibrar la contratación de seguros con una mayor retención de riesgos, según refleja el informe ‘2021 Captive Landscape’ elaborado por el corredor de seguros y asesor de riesgos Marsh.
Una compañía cautiva es una entidad aseguradora constituida por un grupo no asegurador para cubrir los riesgos del grupo que la controla.
Según ha revelado en su informe, Marsh ayudó a sus clientes a crear más de 100 firmas cautivas de diferente índole en todo el mundo durante el pasado año, casi el doble de la tasa histórica de creaciones anuales. En conjunto, las primas de D&O suscritas por cautivas administradas por Marsh aumentaron un 50% en 2020.
La directora del Departamento de ART y Cautivas de Marsh España, Rocío Pereira, ha afirmado que las organizaciones españolas «han seguido la tendencia global», ya que en 2020 se duplicó el número de solicitudes para analizar vehículos de retención de riesgos, tanto a través de celdas como de cautivas de directo y reaseguro.
«En muchos casos, estos estudios incluían la suscripción de riesgos menos tradicionales como los ciber», ha añadido. En este sentido, el número de cautivas que suscribieron riesgos cibernéticos creció un 13% en 2020, al tiempo que las primas netas suscritas en este ramo aumentaron un 54%.
«Las cautivas permiten que organizaciones de todos los tamaños administren mejor sus costes y tengan un mayor control de sus planes de seguros, lo que las convierte en un mecanismo de financiación de riesgos enormemente popular en el complejo mercado de seguros actual», ha asegurado la presidenta de Marsh Captive Solutions, Ellen Charnley.